miércoles, 31 de agosto de 2011

Día 44: Agde-Sète


Sète desde el mar.
Pasando la primera tanda de puentes levadizos en Sète.
Pasando la segunda tanda de puentes en Sète.
Èthang de Thau, al norte de Sète, acceso a los canales.
30.08.11. Madrugué para tener todo preparado para salir. Desayuné, estibé todo y fui a ver a Any y Pierre para ver si me podían dar las indicaciones para entrar en Sète. Me comentaron que debía de entrar dentro del puerto, y atracarme en el Quai d’Alger hasta las 18:45, que es cuando abrían el Pont de la Victoire y el Pont du Tivoli. Me dijeron que 20 minutos más tarde abrían el Pont de la Gare y el Pont Sadi Carnot, que se abrían al Éthang de Thau. Allí, a la entrada del canal de Rhône a Sète había un varadero dirigido por un amigo de ellos, Gilbert. Me dijeron que preguntara por él, que se encargaría de bajarme el palo. Así haría. Sobre las 10:00, y tras despedirme de Any y Pierre y agradecerles por enésima vez toda la ayuda y hospitalidad, largué amarras. En un cuarto de hora escaso estaba saliendo por la desembocadura del Hèrault. Tanto el viento como el mar estaban completamente en calma, por lo que tuve que recurrir al motorcito. Puse rumbo 132º hacia el S de la Isla  de Brescou, en Cap d’Agde. Mi velocidad en estas condiciones era de 4 nudos. El paisaje en esta zona era muy curioso, dado que la arena de las playas era oscuro y las piedras que había utilizado para hacer el dique de abrigo del puerto de Cap d’Agde eran negras, y es que aquí hay un volcán, ya extinto. Sobre las 12:00, cuando ya me encontraba al E de Marseillan-Plage, se levantó un poco de viento (4-5 nudos) del SE, que fue arreciando hasta el final de la travesía hasta los 10 nudos. Icé la mayor y saqué la génova. Pude bajar de revoluciones el motor y aún así estaba haciendo unos 5 nudos de velocidad. Tras pasar el cabo, puse rumbo al 043º, directo al puerto de Sète dejando por estribor una zona de navegación prohibida. Llamé a VNF en Arles para confirmar el calado del Canal du Rhône a Sète y me confirmaron que era de un mínimo de 2.5 metros. De repente se oyó un ruido horrible, muy fuerte. Era un caza militar, que me pasó  bastante cerquita. Iba a una velocidad de vértigo, en escasos 3 segundos se perdió tierra adentro. Llegué a la bocana de Sète sobre las 14:00 y me amarré donde me dijo Pierre. Aquí debía de esperar hasta las 18:45. Me saqué una merecida cervecita bien fría y me puse a comer. Al poco se acercaron 2 agentes de aduanas que me pidieron ver los papeles del barco y mi documentación. Al poco, llegaron otros 4 agentes más, y entraron en el barco. Me pidieron que bajara yo también. Éramos 7 personas dentro del barco, un agobio tremendo. Me rebuscaron hasta en la cartera, que miraron para ver cuánto dinero llevaba a vaya usted a saber qué. Se metieron con zapatos y todo en mi cama, la cual pisotearon sin compasión. Hablaban entre ellos comentando lo “artesanal” que era mi barco, y creo que es les mosqueaba. Me preguntaron varias veces si yo había hecho el barco por dentro. Les dije que yo los mamparos no los había tocado desde que compré el barco. En fin, después de mucho rebuscar y preguntar se ve que se dieron por vencidos, pero era evidente que se iban con la mosca detrás de la oreja. Luego se fueron a rebuscar en el barco que atracó frente a mi. Ya me tocaba recoger todo el desastre que me habían dejado hasta que fuera la hora de pasar por los puentes. Sobre las 18:35 largué amarras para estar preparada para cruzar. La guía imray decía que había que pasar muy rapidito porque enseguida cerraban de nuevo los puentes. Así que ahí estábamos todos los barcos en fila de a uno listos para cuando abrieran. A las 18:45 en punto estaban abriéndonos paso. Yo iba la penúltima en la cola, y según pasaban los últimos, otro velero, el semáforo se puso en rojo y sonó una alarma. Ellos siguieron en cualquier caso y pasaron sin mayor problema. Los primeros dos puentes estaban salvados. Ahora quedaban otros dos. Yo decidí quedarme en el muelle donde me dijo Pierre que me podía quedar. Había muchos pescadores, así que les di un toque con la bocina y enseguida tuvieron la amabilidad de quitar algunas de las cañas y ayudarme con las amarras. Pero ah! Estaba rozando con algo el casco! Pero había mucho calado! Me asomé y había un escalón junto al muelle! Horror! Vaya rozón le pegué al pobre Tortuga en la obra viva. Pero todo bien, sólo era eso, un roce. Me hacía falta una defensa muy gorda para separarme del muelle y salvar el escalón, pero no tenía nada que me hiciera el apaño, así que salí de nuevo. Me asomé al “Maria Helena”, barco también amigo de Pierre y Any, por si podía abarloarme, pero no había nadie en “casa”. Así que decidí cruzar los otros dos puentes. Tardaron unos diez minutos más en abrir el tercer y cuarto puente. Ahora yo iba la última en la fila. El primero lo pasé sin problema, y cuando pasaba el segundo me pasó como al otro velero. Se me encendió la luz roja y la alarma, pero yo seguí para adelante sin más problema. Yo no creo que es que se cierren muy pronto como decía la guía Imray, sino que ven al último llegar y empiezan a encender el mecanismo de cierre, que debe de llevar bastante tiempo (al menos el suficiente para que pase un barco más). Ya estaba en el Èthang de Thau. Busqué las 3 luces verdes del canal para entrar al varadero que me dijeron Pierre y Annie. El velero que iba por delante de mí también entraba al varadero, así que no tuve más que seguirles. Cuando llegué, llamé pero no había nadie. Pregunté a una pareja que estaba en un catamarán en una de las “T”s, y me dijeron que no me podía quedar, que no era una marina. Esto al parecer son unos atraques reservados para la gente que está esperando para subir o bajar el barco al agua, y que se lo dejan gratis a la gente que trabaja en su barco en colaboración con el varadero. Qué buen plan! Yo les dije que venía a bajar el palo, entonces me dijeron que me podría quedar en un amarre pero que a las 10:00 debía de dejarlo libre. Así haría. Ellos mismos me ayudaron a amarrar y me invitaron a su barco a tomar un vino de “bienvenida”. Eran una pareja super amable. En su barco también estaban “mis nuevos vecinos”, una pareja con 3 hijos. Me comentaron que llevaban dos años dando la vuelta al Mediterráneo y que acababan de llegar de Grecia. Al parecer les dan clase a sus hijos por la mañana y por la tarde se dedican a navegar. Qué buen plan! Pero este año los niños iban a ir al colegio antes de dar el salto al Atlántico. El dueño del Catamarán me dijo que el tal Gilbert sólo era un cliente, y tuvo la amabilidad de llamar al dueño del varadero por teléfono. El hombre decía que vendría al día siguiente sobre las 12:00, y que entonces podríamos hablar. También dijo que si yo tenía todo preparado no me llevaría ni mucho tiempo ni dinero bajar el palo. El varadero abre mañana a las 8:00. Iré a hablar con ellos antes de dejar libre el atraque y quedaré en lo que sea para bajar el palo.

Vista de Sète desde el Èthang de Thau.

    • Distancia recorrida: 21 nm
    • Tiempo aproximado: 9 horas (contando con la espera)
    • Distancia total recorrida: 1011 nm
    • Tripulación: -

Día 43: Adge


Vista de Agde.
29.08.11. Hoy ha tocado disfrutar del ambiente pre-canal y hacer gestiones. Me levanté tempranito, pero Pierre y Any me ganaron. Desayunamos y nos acercamos en su zodiac hasta la náutica de Allemand. El hombre era muy simpático. Nos dijo sin embargo que, aunque el río Hèrault no era un problema por su calado (que tenía hasta 4 metros en muchas zonas), el problema estaba en la esclusa de Agde, que sólo tenía 1.40m de profundidad. Mi gozo en un pozo. Tendré que ir hasta Sète para acceder a los canales. Lo que sí es que nos dijo que tenía una “A” de madera de un barco que acababa de subir el palo, y que me la podía llevar sin ningún problema. GENIAL! Un problema menos. Luego fuimos a buscar agua potable con nuestras garrafas, ya que donde estábamos no había. Compramos un poco de pan y algo para comer y volvimos al barco. Fue una mañana genial. Los muelles que hay a la orilla del río son originalmente de los fenicios que fundaron la ciudad. Agde es una de las ciudades más antiguas de Francia. Mi guía dice que es un “sucio pueblo de pescadores” (cito textualmente), pero yo lo encontré completamente al contrario. Era muy bonito, con mucho encanto. Ninguna casa tenía más de un piso de alto, todo orientado hacia el río. Es el típico pueblo que uno se imaginaría en el centro de Francia. En la plaza principal había una panadería que vendía un pan con una cara de escándalo, y le daba olor a pan recién hecho y croissants a gran parte del barrio! La gente encantadora, y muy amable. Una amiga de Pierre y Any, Kathy, vino a comer con ellos, y me quedé yo también. Ella tiene una “pèniche” en los canales también, y me confirmó que efectivamente no entraría por Agde, y tenía sus dudas sobre la posibilidad de entrar por Sète. Es una persona encantadora, y nos pegamos unas buenas risas. Al poco de irse ella, vino otra pareja amigos de Pierre a tomar café. Yo aporté unas galletas de canela que estaban muy ricas, y también echamos un rato muy agradable. Nada más dejarles en tierra, vinieron otra pareja muy agradable, amigos de Blanca y Jens (también de Gelves). Con ellos cenamos. Yo con Coco me partía de risa. Estaba “loca”. Qué buena gente! Pero, ¿dónde se había ido el día? Pierre dejó a Coco y su marido en tierra y yo ya, a buenas horas, también me recogí. No pude sino agradecerles enormemente a Pierre y Any toda su hospitalidad.

Día 42: Canet-Adge (río Herault)

Entrada en Agde, río Hèrault

28.08.11. Me levanté sobre las 7:00 para ducharme, desayunar, revisar el motor y pagar al puerto lo que le debía de estos días. Estibé todo y fui a repostar. Ya me comentaron que debía aprovechar, dado que en Canet el gasoleo sólo era ligeramente más caro que España pero considerablemente más  barato que en el resto de Francia. Así que llené todos los depósitos a tope. Sobre las 9:00 estaba saliendo por la bocana. Me encontré una marejadilla suave y un viento del NW de unos 11 nudos. Fue perfecto. Icé mayor y génova y apagué el motor. No pude evitar pensar que debía de aprovechar y disfrutar de este momento, ya que sería una de las últimas navegaciones a vela antes de llegar a Alemania. Me dio un poco de tristeza, pero pienso que ha sido la decisión adecuada el ir por los canales. Ya se verá qué tal una vez dentro de la red. Mi velocidad en estas condiciones era de unos 5 nudos. Había barcos deportivos pescando que tuve que ir sorteando. Al N también se veían bastantes veleros disfrutando de un día tan bonito. Intenté empaparme todo lo que pude del silencio y el sonido del mar contra el casco, pero como dice el dicho (aunque adaptado al mar), siempre viene alguien que “lo jode”. Los tractoristas no paraban de pasarme super cerca, uno detrás de otro. En fin, aún así era difícil estropear el momento. El viento pronto cayó y empezó a rolar lentamente hacia el N, así que tuve que arrancar de nuevo el motor. Después del silencio me pareció que hacía más ruido de lo normal. Al poco me respondieron Pierre y Any (del “Troll”) al sms que les mandé el día anterior. Sabía que estarían por Sète, y pensé que sería genial poder verles. Me decían que estaban en el río Hèrault, en Agde, así que cambié rumbo al 037º para pasar la noche con ellos. Terminé por guardar el génova y mantener la mayor izada para mantener la estabilidad. El mar y el viento terminaron por calmarse por completo. Por fin, sobre las 15:00, el viento roló a levante y me permitió navegar un poco más a vela. Al poco, el viento terminó por instalarse de SE, tal y como habían predicho MeteoFrance y Passage Weather, con unos 15 nudos. Ahora mi velocidad era de 5.2 nudos.
Abarloada al "Troll" en el Río Hèrault.
Sobre las 16:00 ya estaba al través de Narbonne y a 10 millas de la desembocadura del Hèrault. El mar arreció por el viento que soplaba. Pero tanto mar como viento me venían de aleta, lo que me permitió hacer una navegación muy cómoda. Las últimas millas las hice a 6.5 nudos! Me crucé con un grupo de delfines mulares. Iban muy agrupados y me cruzaron por la proa. Daba la sensación de que debía de haber un paso de peatones o un semáforo ahí! Una vez que se agruparon todos a mi babor y que los hube dejado un poco atrás, empezaron a dar saltos y piruetas. Daban volteretas en el aire y saltaban de dos en dos y de tres en tres cruzándose en el aire. Parecía que estaban fardando. No pude soltar un “alaaaa” y un “ohhhhh” en voz alta ante tal espectáculo! Una vez llegué a la desembocadura, puse proa al viento y a la mar para guardar velas. No fue hasta entonces que me di cuenta lo malo que estaba el mar! Mientras estaba guardando la mayor, veía como el Tortuga hincaba la proa en las olas! Guardé como pude y volví a poner rumbo a la desembocadura. Entré sin mayor problema en el río. La vista era preciosa. Pronto encontré a Pierre y Any en el Troll. Estaban a una milla y media de la desembocadura, justo antes del primer puente que hay para acceder a la red de canales. Me permitieron que me abarloara a ellos. Me invitaron a un buen vino francés y a cenar. Qué alegría volver a verles! Ellos salieron de Gelves a primeros de julio. Me comentaron que ellos pensaban que se podía acceder a los canales por Agde. La verdad es que ya que estaba ahí, era una buena opción. En realidad fue la primera opción que consideré cuando planeé el viaje con el Maid of Iona. Además, Henry Allemand, el que lleva la náutica de Agde y que baja y sube los mástiles, es íntimo amigo de ellos. ¿Qué mejor opción? Mañana iremos a hablar con él, para asegurarnos de los calados y ver cuándo podría bajarme el palo. A ver qué tal!

    • Distancia recorrida: 43 nm
    • Tiempo aproximado: 9 horas
    • Distancia total recorrida: 990 nm
    • Tripulación: -

sábado, 27 de agosto de 2011

Día 41: Otro día más en Canet

27.08.09. Hoy ha tocado poner el barco a punto para los canales, informarme de cuales son las mejores formas de llevar el palo en cubierta, etc. Y por fin me he decidido a entrar en los canales por Sète, coger el Canal du Rhône a Sète, de allí pasar por la esclusa de Saint Gilles para acceder al Petit Rhône y de allí al Grand Rhône. Hasta llegar a Arles, serán unos dos días de jornada. Hoy el tiempo ha estado revuelto hasta bien entrada la tarde, cuando ¡por fin! calmó el viento, como bien predijo el Passage Weather. Si se mantiene así toda la noche, el mar mejorará lo suficiente como para poder salir mañana!

viernes, 26 de agosto de 2011

Día 40: Espera en Canet en Rousillon

Vista de la playa de Canet en Rousillon


Atardecer en el puerto de Canet
26.08.11. Hoy ha tocado esperar. Por la mañana hacía un día precioso. Viento genial para navegar y el mar plato, como un espejo. Me desperté super tarde, a eso de las 9! Estaba super cansada de los días anteriores. Estuve a punto de prepararme para salir, pero la verdad es que no tenía ninguna gana de jugármela. El passage weather y la Meteofrance decían que venía mucho viento (tramontana a 30 nudos) y que traería muy mala mar (olas de 3 metros). Así que decidí que, para dar un salto pequeño, me quedaba aquí que estaba muy bien. Me encontré la cubierta LLENA de arena del viento del levante que sopló anoche. Me trajo toda la arena de la playa. Vaya gracia después del buen baño que le di al Tortuga ayer. Esperé a que la tramontana se lo llevara. Tocó vaguear y hacer llamadas a las náuticas para que me bajaran el palo. Llamé a dos en Agde. Una de ellas me dijo que todo lo tenía que hacer yo, y que ellos sólo movían la grúa 15 minutos para bajarme el palo. Bueno, no estaba mal. Llamé a la otra, y ni siquiera hablaban otro idioma que no fuera francés. Fue imposible la comunicación así que “merci y bye bye”. Luego me puse a “estudiar” las cartas de los canales. Hay tres posibilidades principales para entrar en los canales: 
1. Agde, la más cercana, pero tocaba navegar por los canales durante dos-tres días para llegar al Ródano. El problema viene en que hay que navegar por el canal Du Midi para llegar a Sète y de allí al Ródano, y el Du Midi, según algunas fuentes (no todas) no cala másde 1.40 en muchos sitios. 

2. Entrar por Sète, que está a unas 25 millas de Agde. Ahí hay una marina en condiciones con varias náuticas y una oficina de la VNF (la que te vende las pegatinas para navegar por los canales). Entrar en Sète supone sólo 70 km de canales hasta el Ródano y calado de 2.00 m asegurados, ya que han hecho el dragado hace muy poco. 

3. La tercera opción es llegar hasta la desembocadura del Ródano, que se encuentra ya bastante más lejos, en Port Camargue. Este es el puerto más grande de Europa, para que os hagáis una idea. Es un puerto masivo con servicios de todo tipo. Probablemente más caro todo. Punto a favor, es que voy a vela hasta allí y me quito 70 km de canales. De momento en mi cabeza va ganando Sète. Parece una ciudad más equipada que Agde y donde podré encontrar material en caso de que verdaderamente cada uno tenga que buscarse la vida para bajar su mástil. Me harían falta en el peor de los casos 2 cruces de madera o metal, como dos caballetes, para reposar el mástil al bajarlo. No creo que los encontrara en Agde. Y metiéndome por Sète me ahorro casi 50 km de canales, y llegaría al “Pequeño Ródano” (Petit Rhône, un afluente del Ródano) en una jornada. Por la tarde, cuando estaba dando una vuelta por la ciudad, cayó una tromba de agua apoteósica, y toda la arena de la cubierta se convirtió en barro!! Mañana tocará otro baño, me temo, ya que no creo que pueda salir…

jueves, 25 de agosto de 2011

Día 39: Portbou-Canet de Rousillon

Amanecer frente a Portbou.
Cabo Cerbere, visto desde Francia.

En aguas extranjeras, bandera de cortesía.
25-08-11. Me levanté sobre las 5:30. Quería aprovechar bien la mañana y refugiarme en Canet de Rousillon, cerca de Perpignan. Vi por Internet que era más económico que los puertos de alrededor, por lo que si debía de refugiarme varios días, mejor que estuviera bien de precio. Así que me duché, desayuné y sobre las 6:30 estaba saliendo de Portbou. Cuando alcanzaba Cap Cerbere (que es el cabo que limita España con Francia), la correa del motor empezó a chirriar. Ayer también lo estuvo haciendo, así que no le di más importancia. Sin embargo a los pocos minutos el motor empezó a perder potencia, y el cuenta-revoluciones oscilaba muy bruscamente. Así que di media vuelta hacia Portbou de nuevo. Llamé al puerto para avisarles de que volvía a entrar, pero no respondieron. En cualquier caso, entré directamente. El marinero de servicio me vio entrar y me echó una mano para abarloarme al muelle. Le comenté el problema y me dijo que no había ningún problema en quedarme hasta solucionarlo. Efectivamente la correa estaba floja. Me llevó 10 minutos escasos tensarla. Volví a arrancar el motor y comprobé que todo funcionaba como debía. Así que volví a salir. Eran ya las 7:45 cuando entraba en aguas francesas, así que icé la bandera de cortesía. Tanto el viento como la mar estaban completamente en calma y disfruté de un amanecer precioso. ¿La calma que precede a la tormenta? Cuando me encontraba al E del Cabo Béar, sobre las 9:00, se levantó viento de NW de unos 4-6 nudos, así que icé la mayor. El cielo empezó a ennegrecerse. Amenaza lluvia. Pero hubo suerte y me respetó toda la travesía. Poco después el viento empezó a rolar a levante, así que abrí también la génova. Mi velocidad en esta zona era de unos 4 nudos escasos. ¿Habría corriente en contra? La navegación era tranquila, así que saqué los papeles que me fotocopió Ulla (del Maid of Iona) sobre navegar por la Costa Brava y el Sur de Francia. Justo comentaba en que esta zona hay una corriente continua de 1-2 nudos de dirección sur, que se ve incrementada en fuerza siempre que sopla algún viento de componente N o E. Así que ahí tenía mi respuesta. Esto explicaba mi velocidad de “tortuga” que traía desde L’Estartit o así. Sobre las 11:30 la situación se puso bastante más preocupante. El viento arreció hasta los 18-20 nudos y el mar tampoco tardó en responder con una marejada. Guardé parte del trapo de la génova e hice un par de bordadas para entrar en puerto. Sobre las 12:30 ya estaba en la bocana. Llamé al marinero y enseguida me recibió con su barca para indicarme el amarre. No fue fácil atracar con el viento que soplaba, y la ayuda del marinero fue esencial. Me pegué una merecida comida y correspondiente siesta. De venir madrugando tanto los últimos días me estaba pasando factura. Luego le di el baño de espuma que le venía prometiendo al Tortuga desde hace ya días. Ahora a mirar el previsión, pero esta mañana daban para el viernes F7 de tramontana, con olas de 4 metros según el passage weather y fuerte marejada según el INM. Así que mañana me tocará hacer turismo. En cualquier caso aprovecharé para ponerme ya en contacto con las náuticas para bajar el mástil. Saludos desde tierras galas!

    • Distancia recorrida: 22 nm
    • Tiempo aproximado: 5 horas
    • Distancia total recorrida: 947 nm
    • Tripulación: -

miércoles, 24 de agosto de 2011

Día 38: L'Escala-Portbou


Vista de Cadaqués, al S de Cap de Creus.
Vista de la Cala de Portbou.
24.08.11. Después de terminar de coser la vela, la icé, la enrollé y me pegué un merecido desayuno. Sobre las 9:30 estaba saliendo del puerto de L’Escala. Puse inmediatamente rumbo al Cap de Creus (048º). El mar y el viento estaban absolutamente en calma. Curiosamente el INM y el passage weather coincidían en que habría marejadilla con F2-3 de levante. Los dos se equivocaron. Sopló todo el día NE, aunque la intensidad sí era 2-3. Sobre las 11:00 arreció un poco más el viento, ya para merecer la pena izar la mayor. Debía de haber corriente en contra, porque a pesar de ir a vela y motor, mi velocidad no llegaba a los 3.5 nudos. La zona del Cap de Creus es impresionante. Son todo acantilados salpicados de calas tan profundas que actúan como puertos naturales. Había mucha gente fondeada en todos ellos. Me quedé embobada todo el camino, mirando cada recodo. Además, a medida que iba avanzando, la luz incidía en los cortados de manera diferente haciendo que el paisaje fuera constantemente cambiante. Sobre las 13:00 estaba frente a Cadaqués, con una bahía que bien podía ser otro puerto natural. Parecía un pueblo con mucho encanto. Alcancé pronto el Cabo de Creus, que está salpicado de pequeñas islas. Mi idea era salvar todas esas islas por el exterior, pero veía que todos los veleros lo pasaban por los canales que había entre ellos. Dado que  “donde fueres haz lo que vieres” (miento, porque si me hubiera dicho el plotter que no se podía, la situación hubiera sido otra) seguí a un velero grande. El paisaje en esta zona no era menos espectacular. Sin embargo, mi desconfianza hacia los “tractoristas” (dicése de aquellos que llevan motoras grandes y caras) se agravó más si cabe. Cuatro de ellos parecían ir en piloto automático y sin gente abordo. Iba a vela y tenía preferencia evidente de paso, pero en ninguno de los cuatro casos pude seguir mi camino. De hecho, hasta que no estaban tan cerca y a rumbo tan directo de colisión como para temer por mi integridad física no cambiaban el rumbo, y sólo cuando yo tocaba la bocina y hacía un viraje claro para que supieran que evitaba colisión. En fin. Tontos hay en todas partes. El caso es que tuve miedo en 3 de las 4 ocasiones. De todas formas el paisaje valía todos los acosos de tractoristas. El día transcurrió nublado y continuó así hasta llegar a Portbou. Alcancé el puerto hacia las 3 de la tarde. Pensaba fondear, así que pedí un “amarre de cortesía”. Cuando entré en puerto, me encontré con Albert, quien bien me aconsejó para pasar el temido Cap de Creus. Dado que debía hacer unos recados en el puerto (que me llevarían más tiempo del que quería usar del amarre de cortesía, y dado que si echaba el optimist al agua yo sola no podría volver a subirlo), decidí quedarme en el amarre a pasar la noche. Además el precio era bastante razonable visto lo visto en anteriores puertos. Albert y su mujer Neus me acompañaron muy amablemente a hacer los recados que debía hacer. Más tarde cenamos en su casa con sus hijos. Echamos una tarde genial! Muchas gracias! Por la hospitalidad y por toda la ayuda! Espero que nos veamos pronto...

El Passage weather y el INM dicen que habrá E-SE de viento y que entrará marejada por la tarde. Meteofrance da NW (la temida tramontana). El Passage weather y el INM dan que entra tramontana el viernes. Quién acertará?? ::redoble de suspense:: 

Saldré bien tempranito para ver si puedo llegar a Leucate o un puerto cercano. Donde entre, tendré que quedarme al menos un día a que pase la que se avecina.
 
    • Distancia recorrida: 26 nm
    • Tiempo aproximado: 6,5 horas
    • Distancia total recorrida: 925 nm
    • Tripulación: -

martes, 23 de agosto de 2011

Día 37: Sant Feliú de Guixols-L'Escala


Islas Medas
Vista de los acantilados al N del L'Estartit
Las motoras pasaban tan cerca que dificultaban la navegación.
23.08.11. Salí del Puerto de Sant Feliú sobre las 6:50. El INM decía que se iba a poner malo por la tarde, así que quería aprovechar bien la mañana. El passage weather decía que empeoraría a partir de las 15:00 UTC, aunque tomo la información con cierta reticencia dado que esta web no tiene demasiada resolución en esta zona. Al salir encontré marejadilla y un viento “terral” (aquí del NW) de unos 6-10 nudos. El viento más tarde roló a componente N aunque manteniendo la intensidad, por lo que decidí usar génova y mayor para trasluchar. Sobre las 11:00 me encontraba al E de Cabo Begur. De allí puse rumbo 340º para pasar las Islas Medas por el interior y disfrutar un poco de las vistas. Poco a poco el viento empezó a amainar y rolar a E. Cuando me encontraba frente a las costas del L’ Estartit (en el canal de las Islas Medas) el viento arreció hasta los 20 nudos (probablemente por el “efecto canal”). Había DECENAS de embarcaciones. Me pasaban caóticamente por proa, popa, babor y estribor, y más cerca de lo que me gustaría. Esto hacía que el agua “hirviera” y venían olas por todos lados, haciendo la navegación muy incómoda. Tuve que trasluchar en numerosas ocasiones para salir del canal, y en una de las viradas la génova se enganchó en la cruceta y se rajó. Lo que me faltaba! Así que continué con la mayor. Muy lentamente pude salir del canal, y a motor me acerqué a los acantilados del L’Estartit. Era una vista impresionante, y los barcos podían pasar muy cerca gracias a la profundidad. El viento terminó por instalarse, como bien habían predicho, de SE, así que entré en la Bahía de L’Escala de empopada. Mi intención era fondear en la bahía, pero teniendo que coser la génova me obligaba a entrar en puerto. Llamé al Club Náutico y me asignaron rápidamente el P28. Atraqué y lo primero que hice fue bajar la génova para evaluar daños. Necesitaría más trapo para cambiar un paño completo. Fui a registrarme al club y les pedí el teléfono de algún velero. Enseguida me pusieron en contacto con Gloria, quien me vendió un metro de Dacron. Me pasé toda la tarde cosiendo. Sobre las 12 de la noche se me trabó la máquina de coser. Tenía que ser un problema super sencillo, pero yo no lo veía. Me ofusqué por completo y también me desesperé. Al final me fui a la cama sobre las 1:00 con un enfado del 7, por no encontrar el problema de la máquina. Esta mañana me he levantado tempranito y enseguida he visto el problema de la máquina (era la tensión del hilo!!! Tan sencillo como eso). He terminado de coser la vela en 10 minutos! He mirado la previsión del INM y el passage weather, y ambos coinciden en que habrá unos 10 nudos de viento de levante y marejadilla. Perfecto! Salgo a atacar el Cabo de Creus, el último gran cabo de la travesía. Espero llegar a Porbou por la tarde. Podría ya meterme en Francia, pero quiero arreglar unas cosas antes de navegar aguas francesas…

    • Distancia recorrida: 35 nm
    • Tiempo aproximado: 7 horas
    • Distancia total recorrida: 899 nm
    • Tripulación: -

Día 36: Sant Andreu de Llavaneres-Sant Feliú de Guixols

La nube al salir del Puerto, cubría numerosos barquitos de pesca.

El color del agua era surrealista en la cala donde fondeé.
Vista del Paseo Marítimo de Sant Feliú de Guixols. Vaya pueblo con encanto!
22.08.11, Salí del Club Náutico de El Balis hacia las 8:30. Me encontré con una mar absolutamente en calma y un viento del NE de unos 8 nudos. El viento me venía de proa, así que sin ganas de trasluchar, puse rumbo directo a Sant Feliú de Guixols. El viento debía de rolar al SE. Frente a Canet de Mar encontré una nube aislada casi a ras de mar. La nube estaba justo sobre un grupo de barcos deportivos que estaban pescando, por lo que tuve que andar con mil ojos para no darle a alguno. Mi velocidad en este tramo era de unos 4.5 nudos. Por la emisora escuchos que un pesquero en Ibiza está mandando un mayday. En los últimos días vengo escuchando varios maydays y varios “pan pan”. Todas las embarcaciones en Baleares. Qué mal rollo. Pasé por 3 zonas donde el agua “hervía” por la actividad de los peces. Iba arrastrando mi “liña”, e hice por pasar por estas zonas, pero no hubo suerte y no calló nada. Al poco tiempo el viento (aun de NE) arreció hasta los 12 nudos constantes, por lo que decidí trasluchar. Primero me abrí unas 3 millas de la costa y luego viré hacia Blanes, haciendo una velocidad de 6 nudos. Cuando dejé Blanes atrás, el viento volvió a caer y volví a recurrir al motorcito. Así también aproveché para pasar cerca de la costa, que estaba salpicada de pequeñas calas de agua clarísima y acantilados. Sobre las 13:30 me encontraba pasando frente al Cabo de Tossa. Este cabo es especialmente bonito. Había un fuerte a nivel de la playa entre dos montes próximos. Cuando estaba a unas 3 millas de la bocana del puerto de Sant Feliú el viento me abandonó por completo, así que recogí velas y me preparé para atracar. A una milla de la bocana, el puerto se cubrió por completo con niebla. Apareció de repente, y se veía como iba avanzando hacia el S. Con el plotter podría entrar perfectamente, pero me daba miedo pasarle a alguien por encima, especialmente a unos niños con unos “optimist” que vi que estaban navegando antes de entrar la niebla. Así que di media vuelta y fondeé en una cala cercana. Las vistas eran absolutamente impresionantes. Daba casi hasta “cosa” bañarse de lo transparente que estaba el agua. Daba vértigo de lo bien que se veía el fondo. El barco no parecía estar flotando sino volando! La sombra se reflejaba sobre el fondo. En escasamente media hora levantó la nube y entré en puerto. Había quedado con Pepita, que me iba a dar una vuelta por Sant Feliú. Estaba atracada en la gasolinera, pero Pepita no lo encontró. La pobre dio mil vueltas por el Club Náutico! Tuvo que volver a su casa para volver a llamarme. Quedamos en el Bar del Club Náutico y por fin nos encontramos. Pasamos una tarde estupenda. La ciudad es una auténtica preciosidad. Vimos el Ayuntamiento, el Mercado, el Monasterio y la Puerta a la Ciudad. Y también el Estanco de los Lora! J Prometí volver con más tiempo!

    • Distancia recorrida: 33 nm
    • Tiempo aproximado: 6 horas
    • Distancia total recorrida: 866 nm
    • Tripulación: -

Día 35: Casteldefels-Sant Andreu de Llavaneres

Aviones frente al Aeropuerto del El Prat de Barcelona.

21.08.11. Parece mentira. Me sonó el despertador sobre las 7:30, lo apagué y ni corta ni perezosa me volví a dormir. Cuando me quise dar cuenta eran las 8:45. Desayuné en un “pis pas” y llevé el Tortuguita a la gasolinera, para repostar y devolver la llave a la oficina del puerto. Sobre las 10:00 estaba saliendo de Port Ginesta. Puse rumbo E, como venía siendo habitual en las últimas travesías, para abrirme un poco de la costa. Tanto el viento como el mar estaban completamente en calma. Tuve que tirar de motor. Hacía unos 4.5 nudos con el motor a unas 2,000 rpm. Pasé muy cerquita del aeropuerto del Prat. Daba bastante impresión ver cómo los aviones despegaban muy cerquita de la playa y “viraban” justo por encima de mi mástil. Justo cuando tenía el aeropuerto en mi través, el viento “arreció” hasta los 4-5 nudos, lo suficiente para izar velas y ganar medio nudo de velocidad. Una vez que vi que podría salvar la Punta del Llobregat (sobre las 12:00) puse rumbo 050º, rumbo directo a Sant Andreu de Llavanares, mi destino para hoy. Pasé frente al Puerto de Barcelona sin mayor problema. Me crucé con uno de los ferrys que conectan Barcelona con las Islas. El AIS, que fue de enorme utilidad hoy dado que me enseñó que el ferry varió rumbo cuando me vio (justo lo necesario para evitarme, aunque era complemente imperceptible al ojo). Más tarde sobre las 14:00, cuando ya había dejado atrás Barcelona y a la altura de Mataró, el viento desapareció por completo. Recogí ambas velas y me tocó continuar a motor. Finalmente sobre las 17:00, entré en el Club Náutico el Balis. Estoy ya casi en la frontera con la provincia de Gerona!  Mañana intentaré llegar a Sant Feliú de Guixols, pero si hace bueno fondearé, porque allí los puertos cobran casi 70 euros por noche!! Y yo que me quejaba que los puertos de la EPA cobraban 20 euros por noche! Dónde han quedado! Le di un buen “fregao” al barco. La intención era darle al Tortuga un buen “baño de espuma”, pero no me quedaba jabón, así que tendrá que ser en el próximo puerto. Ahora a planear la próxima singladura. Hasta mañana!
El AIS echaba humo frente al Puerto de Barcelona

Club Náutico de El Balis (Sant Andreu de Llavaneres)

    • Distancia recorrida: 35 nm
    • Tiempo aproximado: 7 horas
    • Distancia total recorrida: 833 nm
    • Tripulación: -

Día 34: Tarragona-Casteldefels

Vista de Tarragona.

20.08.11. Salí del Puerto de Tarragona hacia las 8:40. Tanto el viento como el mar estaban completamente en calma. Decidí abrirme unas 3 millas de la costa para salvar los numerosos cabos que me iba a encontrar durante la travesía. Puse rumbo E (092º para ser más exactos). La intención era llegar a Casteldefels y visitar a Concha & familia. Eché la liña. Con un poco de suerte pescaría algo para invitarles a cenar. Sobre las 10:00 llegué al S de Torredembarra. Cambién rumbo al 080º, ya directo a Port Ginesta (Casteldefels). Se levantó una brisa de 4-5 nudos del SE, por lo que icé la mayor. Haciendo esto le gané escasos 0.5 nudos a lo que venía haciendo con el motor. Al poco el viento arreció un poquito más y decidí sacar también la génova. La velocidad entonces aumentó a 5 nudos. Hacia las 12:15 me encontraba ya frente a las costas de Calafell y sobre las 13:30 frente a Vilanova y la Geltrú. En esta zona encontré muchísimos veleros navegando. En cualquier caso, con 3-4 de ellos entré en rumbo de colisión. Yo tenía preferencia de paso en todos los casos, pero en todos lo casos ellos no maniobraron y tuve que terminar cayendo yo. Domingueros… Las condiciones meteorológicas se mantuvieron exactamente igual hasta mi llegada a Casteldefels. Cuando ya me preparaba a entrar en puerto (y cuando me disponía a recoger la liña), picó una dorada. La saqué del anzuelo y eché el arte para que fuera más fácil recogerlo. Pero antes de que lograra hacer esto, picó otra dorada. Vaya suerte! Entré en puerto hacia las 15:30. Port Ginesta es un puerto muy bonito. Recogí un poco el barco y me fui a pegarme una merecida ducha. Laura muy amablemente vino a buscarme al amarre y nos tomamos una cervecita en su casa. Me hizo muchísima ilusión ver de nuevo a Concha! Hacía tantísimo tiempo que no nos veníamos! Laura luego se ofreció a bajarme al pueblo para poder comprar algo de comida y bebida, que empezaban a escasear en el barco. Dejamos la compra en el barco y subimos a cenar. Al poco de regresar nosotras, llegaron Carlos, Laura, Mónica y sus padres! A ellos sí que hacía tiempo que nos les veía!! Fue una tarde/noche ESTUPENDA. Gracias de nuevo, y espero que no tardemos tanto tiempo en vernos otra vez!! Laura tuvo la enorme amabilidad de bajarme de nuevo al barco. Laura también vino y le enseñé brevemente el barco. Era ya tarde. Tocaba ya dormir. Mañana tendré otra buena travesía!

    • Distancia recorrida: 33 nm
    • Tiempo aproximado: 7 horas
    • Distancia total recorrida: 798 nm
    • Tripulación: -

sábado, 20 de agosto de 2011

Día 33: L'Amentlla de Mar-Tarragona


Vista del Anfiteatro romano de Tarragona
Circo romano de Tarragona
19-08-11. El INM daba para hoy F4-5 de NE, lo cual rolaría y amainaría a partir del mediodía a F3 del SE. El passage weather daba viento en calma y marejadilla. Al final uno de los marineros que estaba de guardia la noche anterior en el puerto tenía la llave que me hacía falta para cambiar el filtro de aceite, así que me lié la manta a la cabeza y cambié tanto el filtro como el aceite del motor. Así que lo primero que hice por la mañana fue revisar el estado del motor tras el cambio de aceite: ver que no hubiera pérdidas y arrancar para ver que, tras pasar el aceite por el filtro, el nivel no quedara demasiado bajo. Todo estaba bien, no había pérdidas y no hubo que echar más aceite. Así que sobre las 10:30 estaba largando amarras. Cuando salí de la bocana del Puerto de L’Amentlla, me encontré con la mar bastante mala, con olas que venían de levante. El viento era de NE. Si quería entrar a las olas por la amura (lo cual era lo único factible) debía de poner proa al viento. Así que así hice, puse rumbo 060º, rumbo directo al Cabo de Salou, y empleando únicamente el motor. A medida que iba pasando la mañana, el mar se iba calmando. Sobre las 13:00, intenté trasluchar, pero el viento era tan escaso que decidí continuar a motor y guardar las velas. La velocidad media en este momento era de 4 nudos. Por fin, hacia las 14:00, el viento se terminó por instalar de SE, como bien predijo el INM. Icé mayor y génova y mi velocidad pasó a ser de 5 nudos. Llegando al Cabo de Salou (ya con Tarragona a la vista) el tráfico de mercantes aumentó considerablemente, así que encendí el AIS. Había 12 mercantes fondeados frente el puerto, dos más entrando en puerto y dos más en el pantalán de petróleo. Había, frente a la bocana del puerto comercial, una zona de navegación restringida, la cual decidí dejar a mi estribor, haciendo que me acercara a la pared del dique de levante. Craso error. Este muelle discurre N-S, y las olas venían del E. Estas olas impactaban contra la pared, rebotaban y volvían. Me encontré en una zona que más que mar parecía una batidora. Las olas, de tamaño considerable, venían de ambos lados. Nota metal: no volver a repetir la experiencia. Enseguida alcancé el puerto deportivo de Tarragona. A 1 milla de la bocana, puse rumbo al viento para recoger génova y plegar la mayor. Cuando hacía esta última tarea antes de entrar, un golpe enorme sacudió al Tortuga. Pensé en un primer momento que había un bajo que habría pasado por alto en la carta. Fui rápido a la sonda, la cual marcaba más de 22 metros de profundidad. En el agua si una sombra muy rectangular, que enseguida dejé atrás (Tortuga seguía andando dado que suelo conectar el piloto automático mientras recojo velas). Me quedó la duda de si sería un contenedor navegando a dos aguas. Entré en puerto y enseguida vi al marinero indicándome el amarre. Antes de nada miré la sentina a ver si había agua. Buena señal: no había agua. El agua del puerto estaba muy clara, por lo que luego desde el muelle estuve mirando un poco el casco. No había daños claros. En estos casos me alegro de tener un barco de metal!
El marinero, al hacer el registro, me dijo que era festivo, y que eran las fiestas de Tarragona. Así que cerré el barco y fui a ver el Anfiteatro, el Circo y la Torre romana, todas ellas datadas del s. I d.C. Cuando subía a ver la catedral, me crucé con el pasacalles de Gigantes y Cabezudos. Digno de ver. Mañana intentaré llegar a Ginesta. Estoy sólo a unas 30 millas, y la predicción meteorológica es buena. A ver si sigue habiendo suerte!

    • Distancia recorrida: 27 nm
    • Tiempo aproximado: 6,5 horas
    • Distancia total recorrida: 765 nm
    • Una fachada de lo más original (Tarragona)
    • Tripulación: -
Desfile de "Gigantes y Cabezudos"


 

    jueves, 18 de agosto de 2011

    Día 32: Vinaroz-L'Amentlla de Mar


    Vistas de L'Amentlla de Mar (Tarragona).

    Entrada al Puerto de L'Amentlla de Mar.
    18-08-11. Madrugué para salir de la bocana del puerto deportivo de Vinaroz sobre las 7:30. Me encontré con un viento “terral” de unos 8 nudos. Traía olor de ganado. Es extraño oler a ganado en medio de mar. Fue una sensación extraña. Icé mayor y génova y puse rumbo 065º, rumbo directo a Cabo Tortosa. Entre el viento y el motor logré hacer una velocidad 5.5-6 nudos, además de estabilizar el Tortuga con los hinchones que me venían del través (que hacían la navegación muy incómoda). Hacia las 8:30 el viento comenzó a rolar a levante, pasando por NE. Durante este tiempo tuve que guardar el génova dado que me venía el viento de proa. Justo en este momento me pasó otro hombre en solitario con su velero, y me hizo un gesto de “¡cómo rola el viento!”. Nos reimos y él, que iba mucho más “ligerito” que yo, enseguida se perdió de vista. Al poco el viento terminó de instalarse de levante. Sin embargo el intenso oleaje ralentizaba mucho mi viaje. Incluso creo que me debió de coger alguna corriente, porque hubo un tiempo en el que había 2.5-3 nudos de velocidad. Sobre las 12:00 llamé al puerto deportivo de L’Amentlla de Mar, para confirmar si tenían amarre para mí esa noche. Normalmente están llenos, probablemente porque cobran entre un 30-50% menos que las marinas que hay alrededor. Me dijeron que sí había amarre para mi, así que tras pasar Cabo Tortosa, puse rumbo a L’Amentlla (provincia de Tarragona) (rumbo 330º). Con el cambio de rumbo el viento me entraba entonces por mi través, a una velocidad de 12-13 nudos, y las olas me entraban por la aleta. Gracias a estas condiciones pude abrir de nuevo el génova y continuar únicamente a vela hasta puerto, haciendo una velocidad de 6 nudos. Hice que el piloto automático me relevara un rato para poder disfrutar de esta segunda parte del trayecto degustando el queso que había comprado el día anterior en Morella. Sobre las 16:30 estaba entrando en el puerto. Enseguida me indicaron el amarre. La idea era ir a comprar la llave para los filtros que me hacía falta para cambiar el aceite al motor. Pero se ve que este pueblo es más bien turístico y no había ferreterías cerca. Tendré que esperar al próximo puerto para cambiar el aceite al motor…

      • Distancia recorrida: 37 nm
      • Tiempo aproximado: 9 horas
      • Distancia total recorrida: 738 nm
      • Tripulación: -

    miércoles, 17 de agosto de 2011

    Día 31: De turismo por Morella...


    Vista general de Morella.
     17-08-11. Hoy no he sido capaz de salir a navegar. Ya me encontraba recuperada, pero no con fuerzas para afrontar saltar el Delta del Ebro. Por la mañana me encontré de nuevo a Pedro y Azu. Salían a dar una vuelta por Morella, una ciudad integrada en “la ruta de los Templarios” y a sólo 50 km de Vinaroz. Me ofrecieron salir con ellos a pasar la mañana. La verdad es que acepté encantadísima. Pasamos una mañana genial! Hicieron de guías por la ciudad. Se encuentra completamente amurallada, y tiene en el centro de la ciudad una montaña donde se encuentra un Castillo a su vez también amurallado. Dimos una vuelta por la ciudad, hicimos cata de quesos y de chorizo de ciervo y jabalí (no sabía que esto último existía). Yo me acabé llevando una cuña de queso viejo puro de oveja y Azu salió con un chorizo de ciervo. De vuelta a Vinaroz fueron tan amables de parar por mi a por gasoil y aceite para el Tortuguita. Esta tarde intentaré aprovechar para cambiar el aceite y el filtro del aceite al motor, que ya se han cumplido las 200 horas desde el último cambio. Mañana, si el tiempo me acompaña, saldré hacia Tarragona. Hasta mañana!

    Uno de los frescos del Claustro del Castillo. Representa a 20 personas bailando lo que llamaban una "sardana macabra" en torno a un muerto. Al muerto le sale un filacterio de su boca que dice "Fui quod estis, eritis quod sum" (Yo he sido lo que sois, seréis lo que soy). A la izquierda arriba se representa el "Árbol de la Vida".

    Vista del Castillo desde el Patio del Claustro.

    Día 30: Oropesa-Vinaroz

    La llampuga que cayó en la liña.

    16-08-11. Sobre las 7:00 am llamé al marinero para repostar (y llené el tanque en previsión de que no haga nada de viento). Sobre las 7:30 estaba saliendo por la bocana. Pongo rumbo 050º para pasar el Cabo de Oropesa. El mar estaba rizado y el viento era de N con una velocidad de 6 nudos. Icé tanto la mayor como la génova aunque sólo me ayudaron a ganar un poco de estabilidad. Sobre las 9:30 el viento comenzó a rolar tímidamente al levante previsto, y sobre las 10:30 ya me encontraba frente a las costas de Alcosebre. Con el viento tan suave que soplaba, la velocidad era de 4.5 nudos. Eché la liña para pasar el rato. No tardé en pillar algo… era una llampuga!
    Sobre las 12:00 ya estaba frente a Peñíscola. Hice por pasar bien cerquita de la costa, para disfrutar de las maravillosas vistas del peñón. Qué vistas! En los acantilados se veía la cueva por la que se puede acceder al Castillo desde el mar. Precioso!
    Vista del Peñón de Peñíscola.
    La navegación transcurrió sin más sobresaltos y exactamente en las mismas condiciones. Hacía muchísimo calor, y empecé a encontrarme fatal. Entré hacia las 13:30 en el Club Náutico de Vinaroz. Cada vez me iba encontrando peor, completamente mareada y con un dolor de cabeza escandaloso! Me eché toda la tarde a ver si me recuperaba, pero no había forma. Hasta que no me di una ducha bien fría no mejoré. Conocí a mis vecinos de barco, una parejita super agradable. Pedro, Canario de “pura cepa” y Azucena, buena “Maña”. Y Linda, su perrita. Son patrones del “Little Home”, un “trawler” que llevan años reparando con mucho cariño. Me fui del tirón a la cama. Mañana sería otro día, pero creo que no para navegar…

      Pedro y Azu en su "Little Home".
      • Distancia recorrida: 30 nm
      • Tiempo aproximado: 6 horas
      • Distancia total recorrida: 701 nm
      • Tripulación: -

    lunes, 15 de agosto de 2011

    Día 29: Burriana-Oropesa

    Un catamarán Estadounidense en el puerto de Burriana.
    15-08-11. Sobre las 9:00 estaba saliendo del puerto de Burriana. Tomé rumbo E para alejarme de la costa unas 3 millas. La mar estaba rizada  y el viento era de N con unos 6-7 nudos. Izo las velas (mayor y génova) y pongo rumbo 052º, lo que me permite ceñir al viento. Hacia las 10:00, cuando me encontraba frente a Castellón de la Plana, el viento comenzó a rolar al NE (en toda la proa!), así que toca trasluchar un poco. Pronto tanto el mar como el viento arreciaron. Ahora el viento venía con unos 20 nudos constantes, y el mar venía de proa, haciendo la navegación bastante lenta e incómoda.  A unas dos millas de Oropesa, y ciñiendo el Tortuga al máximo me doy cuenta que uno de los obenques está "bailando"! Horror! Me "aproo" al viento para revisar la jarcia. Efectivamente, el obenque de babor está un poco flojo. Aunque no más de lo normal. Probablemente ese "bailoteo" se debía a la presión del génova sobre el mástil al ceñir con tanto viento. En cualquier caso, decido pedir al Puerto de Oropesa un "amarre de cortesía" por un par de horas para poder darle un repaso a la jarcia. Pero según me aproximaba al puerto evalué las opciones:
    1.- Me estaba quedando dormida a la caña (ya van muchos días de navegación seguidos...)

    2.- No había podido contactar con el Puerto Deportivo de Alcosebre (mi destino original para hoy), por lo que no sabía ni precios ni si tenían espacio para mi para la noche.

    3.-El mar estaba muy "incómodo" y me ralentizaba enormemente. Aunque únicamente estaba a 12 millas de Alcosebre, me llevaría más de 4 horas llegar. El mar debe de mejorar para mañana. Si me espero, únicamente me llevará un par de horas a lo sumo...
    Cerca de Oropesa. ¡Cómo cambia la orografía! Ya estoy más cerca de la Costa Brava...

    Vista del Puerto de Oropesa desde el atraque que me asignaron.
    Así que sopesando todo, llamo de nuevo al Puerto de Oropesa y les pido un amarre para la noche. Ya me habían comentado que era un puerto muy bonito. Parecía una buena opción. Y tenía ya el presupuesto, lo cual, visto lo visto, es MUY importante! Así que sobre las 13:30 estaba entrando en el puerto. Era realmente bonito. ¡Cómo se nota el cambio de orografía! La zona empieza a tener ya muchos montes y acantilados marinos. La costa se hace mucho más interesante y agradable de navegar. Eso sí, el puerto queda retirado de cualquier población. En cualquier caso tengo muchas cosas que hacer. A ver si mañana puedo llegar a Vinaroz o Las Casas de Alcanar. El miércoles dan viento de SE, así que con un poco de suerte podré atacar el Delta del Ebro!! Hasta mañana!

      • Distancia recorrida: 18 nm
      • Tiempo aproximado: 4,5 horas
      • Distancia total recorrida: 671 nm
      • Tripulación: -